miércoles, 2 de julio de 2014

La Historia De La Moda

La Moda
 La moda (del francés, mode y éste del latín, modus, modo o medida) indica en su significado más amplio una elección o, mejor dicho, un mecanismo regulador de elecciones, realizadas en función de criterios subjetivos asociados al gusto colectivo. La moda son tendencias repetitivas, ya sea de ropa, accesorios, estilos de vida y maneras de comportarse, que marcan o modifican la conducta de una persona. La moda en términos de ropa, se define como aquellas tendencias y géneros en masa que la gente adopta.
Siglo XVI


El Renacimiento italiano (capa corta y sin capucha), el birrete, el sombrero con plumas y los zapatos de punta roma y ancha. Las mujeres también llevaban sus bullones y acuchillados pero en las mangas, y su gorguera rizada, además de las faldas y sobrefaldas, jubones y corpiños, capas o mantos rozagantes y su cofia para la cabeza. A partir de la segunda mitad del siglo, la creciente importancia de la monarquía española, impone en Europa el estilo de la corte del emperador Carlos I de España, un estilo de gran sobriedad, caracterizado por el uso de colores oscuros y prendas ceñidas, sin arrugas ni pliegues y aspecto rígido, sobre todo en las mujeres en las que se impone el uso del verdugado. En el borde superior de la camisa se usa un cordón que dará lugar a la gorguera o lechuguilla.

Siglo XVII


En esta época domina la moda francesa tanto en hombres como en mujeres. Se utilizaban los calzones cortos con medias de seda, chupa y casaca que, a mediados del siglo, se vuelve más reducida y con pliegues laterales hacia atrás y mangas estrechas. Con la caída de la dinastía francesa vuelve el traje simple y se llevan calzones ajustados hasta media pierna, chaleco, corbata y casaca, faldones con cuello alto y vuelo, pelucas empolvadas y rematadas por un lazo, incluso sombreros de tres o dos picos. Después de la revolución, se deja el cabello largo y liso, sombreros de copa alta cónica o en tubo, con alas cortas y más tarde zapatos con tacón de color al que se añaden lazos o hebillas y botas altas con vueltas. La mujer viste con painers o verdugados anchos y aplastados en los dos frentes, corpiño acorsetado y escote con gasas o encajes.


Siglo XVIII

Vestimenta del siglo XVIII en un cuadro de Goya. En el siglo XVIII se destacan como prendas masculinas las casacas francesas y las chupas (casacas de inferior clase y algo estrechas), las chaquetillas, los calzones ajustados hasta la rodilla, las corbatas en vez de las golillas, las pelucas y los grandes sombreros. Mientras tanto, en las vestiduras femeninas continúa el mismo estilo que en el siglo anterior y se adopta el uso de las mantillas para la cabeza. 

Año 1900

La moda comienza en el año 1900 con la llamada silueta S, debido al corsé que empujaba los pechos hacia arriba, estrechando la cintura y sus faldas ajustadas a la cadera ensanchándolas en forma de campana al llegar al suelo. En el mundo laboral se empieza a incorporar los trajes sastre y el corte con influencia masculina para las mujeres.


Década de 1910


En esta década se distinguen dos periodos:
·         El primero hasta comienzos de la Primera Guerra Mundial se caracteriza por ser el apéndice de la moda recargada propia de la Belle Époque, así como por la aparición de una silueta que tiende hacia la verticalidad en la mujer (se ponen de moda los corsés rectos y largos y las faldas con poco vuelo y acompañadas de una sobrefalda) y al orientalismo.
·         El segundo abarca todo el conflicto antes citado y se caracteriza por la aparición de modas mucho más cómodas para la mujer (faldas con vuelo que se acortan hasta casi media pantorrilla y cuerpos mucho más amplios), debido al hecho de que éstas tenían que suplir la falta de mano de obra masculina en los puestos que estos antes ocupaban. Como causa de esta comodidad en el vestir, tenemos la moda andrógina propia de los años veinte.

Década de 1920

En 1920, la ropa comenzaba a ser mucho más práctica. Nuevamente vuelve a cambiar la silueta, descendiendo la cintura a su posición anatómica, marcando el talle y ensanchando los hombros. Se popularizaba el traje de chaqueta para calle y para las fiestas se elegían los vestidos con grandes escotes en la espalda así como abrigos largos con pieles. En esta década se destacan las faldas cortas. Desaparecen los sombreros y se vuelven a dejar crecer el pelo.

Década de 1930

1930 fue una década de guerra y eso perjudicó a la moda. El 'look' se militarizó y los tejidos se volvieron pobres. Debido a esto las chicas se vestían con uniforme de ciudad, es decir, trajes de chaqueta. El largo se elevaba por debajo de las rodillas popularizando los pantys, aunque fueron escasos. Usaban los zapatos topolino, de corcho y los gorritos diminutos que eran muy sencillos o simplemente pañuelos a la cabeza.

Década de 1940

En 1943 volvió el esplendor, triunfó el nuevo 'look' de Christian Dior. Otra vez se vuelve a forzar la silueta con una cintura estrecha y tomaron volúmenes sus hombros y pechos. Se aumentó el vuelo de sus faldas pero se mantenían por debajo de sus rodillas. Comenzó el culto por la belleza porque las mujeres estaban hartas del estilo sobrio y cómodo; las curvas eran el nuevo símbolo de la belleza femenina. Los zapatos se estilizaron haciéndolos más puntiagudos, usaban abrigos de paño, bolsitos al codo y los más elegantes sombreros.

Década de 1950

Esta década se destaca por la revolución. Se utilizaba ropa cómoda dando lugar a la ropa juvenil, dejando atrás el lujo burgués. Se había puesto de moda la ropa extravagante. Los estampados eran de mariposas y de flores. Las siluetas volvieron a ser más lisas y se comenzaron a imponer rápidamente por todo el mundo las minifaldas.

Década de 1960

En 1960, los adolescentes se pudieron expresar libremente. Aquí surgió el concepto de la ropa diferente, original, divertida y extravagante. El cabello se usaba corto y con cortes geométricos. Tanto los hombres como las mujeres comenzaron a usar pantalones de campana y se impusieron las blusas de algodón, etc.

Década de 1970

1970 fue una década muy diversa, aquí se produjo un furor hacia lo retro. Las flores fueron el principal símbolo no sólo en la ropa sino que también el pelo, y representaban la ideología ilusoria que los guiaban a la llamada revolución de las flores. Resaltaban los trajes y vestidos, que se lucieron con ajustados pantalones. El algodón fue remplazado por la lycra, usaban botas o zapatones de taco, tipo suecos.

Década de 1980

En 1980, la moda trajo consigo considerables cambios. El nuevo estilo se caracterizaba por el uso de ropa interior visible, ya sea sobre una camiseta, debajo de una camiseta translúcida o tirantes de encaje visibles. Esta nueva moda fue altamente controvertido volviéndose un sinónimo de liberación para las mujeres, ya que antiguamente usar la ropa interior así les daba aspecto de una mujer desarreglada. Gracias a esta tendencia, las mujeres de hoy pueden vestir camisetas cómodas sin tener que preocuparse por las transparencias o los tirantes de los corpiños.

Década de 1990

Esta época se basaba en la variedad y no en una tendencia específica y duradera. La gente trataban de ponerse lo que le hiciera sentirse más cómoda, sin darle mucha importancia a la opinión de los demás o a las tendencias, porque se había llegado a la conclusión de que no había una verdadera libertad. Las camisetas de grupos musicales se volvieron populares así como el cabello suelto. La gran innovación fue la aparición de los piercings, tatuajes y pinturas de pelo.

Siglo XXI

A finales del siglo XX y principios del XXI, era posible ver, encargar y enviar la ropa a cualquier parte del mundo gracias a medios de comunicación o Internet. Por consiguiente, la moda actual parece que se está dirigiendo hacia una uniformidad universal.

Década de 2000

En el 2000 la moda se fue asociando y cambiando según las distintas tribus urbanas, que constituyeron un modo de vivir, una determinada actitud frente a la vida y que generalmente hacen referencia a la juventud. La pertenencia a uno de estos grupos se hace evidente en la ideología, la música, el modo de vida y también en la apariencia, siendo el consumo de determinadas marcas de ropa, el uso de ciertas prendas o colores, distintivos propios de las distintas tribus. Los hombres tanto como las mujeres adoptan el chándal para todo tipo de trabajo u ocasión. Las mujeres usan borcegos, zuecos o sandalias. Se reincorporan prendas de los años 1980, regresando el estampado floreado. Se usan los shorts, polleras, y pantalones tiro alto y las minifaldas.